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Así es el nuevo Peugeot 308.

Para su tercera generación, Peugeot pone de manifiesto la confirmación de su ADN en su máxima expresión y nos ofrece un 308 con un diseño más audaz, deportivo y con mucha tecnología al servicio del conductor, encaminando su trayectoria al sendero de la electrificación.

Podemos aseverar que este producto de la marca gala, estaba generando muchas expectativas, más sabiendo de antemano cuál iba a ser el estilo que iba a incorporar en las líneas definitivas de este totalmente renovado hatchback mediano. Y también es cierto, que pese a la fuerte tendencia actual de abandonar a este segmento de hatchs y sedanes en general para volcarse al mundo de los crossover y SUV´s, Peugeot apuesta fuertemente en este sentido, ya que refuerza su esfuerzo y nos presenta un producto moderno, muy tecnológico y con una variedad de motorizaciones que permite mantenerse vigente y abre ese canal para aquellos interesados en ingresar al mundo de la electrificación. Dicho esto, deseo describir a este nuevo modelo que seguramente va a atraer las miradas y atención, pero no sólo por el hecho de su estilo adquirido e impronta en general, sino también porque una vez que nos enteremos qué aporta en actualización y modernidad, vamos a tener que aceptar su llegada como un oponente de fuerte fuste ante sus competidores más serios dentro de su segmento.

La primera impresión deja al descubierto que algo de sus cotas han variado, ya que en un primer vistazo apreciamos un vehículo un poco más grande: paso a detallarles sus medidas. Crece considerablemente en su longitud, alcanzando los 4.37 (unos 12 centímetros más largo que la segunda generación); es un poco más ancho: 1.85 metros; un poco más bajo: 1.44 metros, pero sobre todo incrementa su distancia entre ejes en unos 5.5 centímetros: logra unos 2.67 metros, asegurando una mayor habitabilidad interior, sobre todo para la segunda fila de asientos. Si bien la capacidad del maletero se redujo muy poco, alcanza los 418 litros, y si rebatimos los respaldares de la segunda fila, se logran 1.323 litros; en las versiones híbridas disminuye más aún su capacidad por la ubicación de la batería recargable, quedando en tan solo 361 litros. Para su construcción Peugeot utilizará la plataforma EMP2 V3.

En cuanto a su estética exterior, vamos a encontrar muchos cambios: su frente está perfectamente identificado con el resto de los modelos presentados últimamente, donde la estrella es la gran parrilla central con el nuevo logo adoptado recientemente por la marca, que oculta tras su frente el radar para el sistema de control de velocidad adaptativo entre otras funciones. Justo encima de ésta, encontramos con números grandes el modelo del auto: 308. Al costado de la estrella, se ubican unos faros del tipo rectangular pero alargados, insertos en el frente como si estuvieran formando parte del gran marco que rodea la parrilla. Y para identificar desde lejos la llegada del Hatch, no podemos obviar los largos y afilados “dientes” del león, característica de su firma de luz diurna. Más abajo encontramos una delgada y alargada parrilla en espejo por la forma de la superior, donde viene adaptada para incorporar la placa identificatoria.

En sus laterales, se simulan unas tomas de aire con un formato del estilo trapezoidal. En general, se aprecia una elaborada terminación de sus bajos, seguramente para favorecer su mejor desempeño aerodinámico. Queda muy claro que la imagen frontal del León es muy agresiva y vistosa. Su lateral luce más estilizado por su mayor longitud. Para ello aportan unas líneas de tensión que resaltan los hombros de los guardabarros, y sin llegar a ser muy agudos, los ángulos que emplea para delimitar las superficies laterales, se amalgaman con las curvas que muestran esas sombras y luces que remarcan su carácter. Un detalle que refuerza su identidad, es la ubicación de su gran logo justo por detrás del pasarruedas delantero. Los diseños de las llantas son nuevos, y dependiendo de la versión aumenta su diámetro y luce una pintura en gris oscuro y perfiles de neumáticos que sugieren alto desempeño dinámico.

El diseño de zaga es totalmente nuevo, adoptando similitudes con el estilo que adoptó el 208. Las ópticas traseras son delgadas y alargadas unidas entre sí por una faja acrílica horizontal, adoptando un nuevo diseño de las características garras del León pero con una inclinación que le dan una visión de forma diagonal. El spoiler o alerón superior del portón de la maletera, es grande, y junto las aletas laterales de la luneta, “engañan” acerca de la verdadera inclinación de ésta. Por otro lado, si miramos en detenimiento su contorno, observamos áreas que van aumentando de volumen a medida que bajamos la mirada. Su paragolpes trasero tiene una gran superficie en plástico negro que protege los contactos con otros vehículos, mostrando unas falsas salidas de escape.

Su habitáculo muestra un verdadero replanteo de su tablero, conservando el concepto que adoptó la marca del León desde hace un tiempo: i-Cockpit. Las formas generales tienen aristas bien pronunciadas y hasta más trabajadas en general. Por supuesto que la presentación general guarda similitud con los tableros de sus hermanos 3008 y 4008. El instrumental que se encuentra por encima del volante de tamaño más reducido al normal, es totalmente digital y configurable por el conductor. Una mención aparte requiere la gran pantalla central digital, cuyo tamaño varía hasta una medida de 10 pulgadas que tiene una orientación hacia el conductor, como toda la disposición general del tablero general. Justo por debajo de la gran pantalla, se ubica un panel de teclas que manejan funciones tales como la regulación de la climatización, balizas y una perilla para el volumen del audio. La consola central fue diseñada con un estilo bien futurista: para la versión automática quita la conocida palanca de cambios y adopta una serie de teclas para las diferentes situaciones: Parking, Retroceso, Neutro y Drive, como en el sistema que apreciamos en la selección de modos de conducción. El sistema de ventilación para los puestos de piloto y copiloto, se presenta en una franja horizontal ubicada justo por debajo del borde superior del tablero general, orientando la dirección del viento justo a la altura de la cabeza de los tripulantes. Otro detalle a destacar, es la diversidad y calidad de los materiales que Peugeot emplea para configurar el hermoso interior, tanto en el tablero como en los paneles de puertas y butacas. Se puede decir que la calidad percibida es muy alta, haciendo hincapié en el acabado y rematado de las terminaciones y encastres. En cuanto a las ayudas y asistencias a la conducción, dispone del sistema de navegación TomTom, el control de velocidad crucero adaptativo con todas las funciones que complementan la seguridad: frenado de emergencia, detección de peatones, cambio involuntario de carril, punto ciego, tráfico cruzado, entre otras.

Respecto a la locomoción, y dependiendo de la región donde se comercialicen, se podrá contar con motores de gasolina, diésel y opciones híbridas enchufables. En cuanto a las gasolineras, cuenta con el motor 1.2 Pure Tech de 3 cilindros que puede entregar 110 o 130 CV, hermanados con cajas de velocidades manual de 6 marchas o automáticas de 8 velocidades (EAT8). Habrá un solo motor del tipo diésel de 1.5 litros (BlueHDI) con las mismas cajas manuales y automáticas. Por último, dos opciones híbridas enchufables que están compuestas por el motor gasolinero de 1.6 litros Pure Tech que puede entregar una potencia de 150CV (110 Kw) o de 180 CV (132 Kw), asociados ambos a un motor eléctrico que entrega 110 Kw, que en conjunto pueden entregar 180 o 225 CV respectivamente. En ambas situaciones están alimentados por una batería de iones de litio con una capacidad que ronda los 12.4 Kwh y una potencia de 102 Kw, y que de acuerdo al ciclo de medición WLTP aseguran unos 60 kilómetros de autonomía, que en la práctica pasan a ser unos kilómetros de menos.

Para la recarga de la batería, debemos tener en cuenta que dependiendo de la potencia con la que se pueda recargar, será el tiempo necesario para su recarga. Pero en líneas generales, insumirá entre un poco menos de 2 horas hasta 7 horas en el caso más lento. Para su comercialización en el viejo continente, habrá que esperar al segundo semestre, y para el resto de las regiones donde Peugeot está presente, seguramente habrá que esperar un poco más.

Como podemos darnos cuenta, Peugeot está apostando fuertemente con este modelo 308, atacando todos los frentes disponibles para interesados que continúan prefiriendo las opciones con motorizaciones convencionales, como a aquellos que están interesados en comenzar a experimentar en la ruta hacia la electrificación. A su vez, me parece muy meritoria la apuesta de la firma gala, consolidando esfuerzos en un segmento que hoy está padeciendo un cambio de tendencia en preferencias de los distintos usuarios, pero aportando una opción muy competitiva y moderna que se planta para presentar pelea entre sus viejos contrincantes. 

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Alberto Mario Kuchen

Apasionado por los autos. Familiarmente vinculado a este maravilloso mundo y al de las carreras de autos: mi padre que corrió en la década de los años 60 con el seudónimo de Sandokán. Como Ingeniero Mecánico Aeronáutico, la tecnología en pos de la seguridad y la mejora continua, siempre llamó mi atención. Mi compromiso con ustedes para compartir e investigar en todo lo que viene.

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