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El impactante Mercedes-AMG GT Black Series.

No es común poder tener contacto con vehículos que agitan la adrenalina que nos transportan a una dimensión poco entendible para el común de los conductores. Pues bien, en esta oportunidad les voy a comentar un poco de lo que es este impresionante y brutal Mercedes cuya figura nos “atemoriza” presagiando un desenlace de potencia, capacidad y dinamismo propio de aquellos vehículos que están concebidos como un super deportivo y demuestran sus atributos en un circuito.

Como acabo de mencionarles, este coche tiene la particularidad de poder desempeñarse con total cintura en un circuito para bajar tiempos y con el potencial de sacarnos las ganas de la conducción de extrema velocidad, por supuesto con la capacidad conductiva acorde a la situación; pero además dispone de la posibilidad de alcanzar un decoroso comportamiento en ciudad, con los recaudos del caso, ya que podrá movilizarse en cintas asfálticas sin muchas alteraciones: pozos, baches, reductores de velocidad, entre otros. Pero llegado el caso, su conducción abarca extremos que nos permiten disfrutar de semejante “máquina” con total facilidad. Para poder darnos cuenta del potencial descomunal que entrega y de la facilidad con que podemos movernos en diferentes ambientes, les voy a entregar algunos datos que son importantes saber para poder entender los comentarios que acabo de hacer.

Sin dudas el corazón está representado por un motor V8 de 4.0 litros biturbo que eroga una potencia de 730 CV a unas 6.900 rpm; es importante hacer mención del par motor o torque que entrega en el volante del motor, llegando a los 800 Nm a muy bajas vueltas de motor. Pero para llegar a esas cifras, el cuartel general AMG que tiene la responsabilidad de concretar los productos más potentes de la marca Mercedes Benz, apela a lo mejor de su tecnología, incorporándole unos nuevos y más grandes turbos de doble entrada, un intercooler de mayor tamaño, nuevos árboles de levas y sobre todo un rediseño de su sistema de escape: esta solución aporta un sonido muy particular y reconfortante a la hora de “irse” en vueltas. Por otro lado, el motor tiene lubricación a cárter seco, al mejor estilo de aquellos motores de alta performance. Todo este arsenal va hermanado con una caja de cambios automática AMG SPEEDSHIFT DCT 7G: traducido, es una caja de doble embrague con 7 marchas; como es un pura sangre deportivo, por lógica su transmisión debe ser trasera. Yendo un poco a registros de performance, su aceleración de 0 a 100 km/h es de 3.2 segundos, y para alcanzar los 200 km/h requiere de 9 segundos. Creo que está demás decir que es un verdadero deportivo.

En lo concerniente a su aerodinámica AMG realizó un trabajo exquisito y de avanzada, muy elaborada en término de detalles para alcanzar un mejor rendimiento de resistencia al avance y con artilugios que lo “pegan” al piso en esas situaciones de mayor exigencia, ya sea a muy altas velocidades como en el desempeño de entrada a curvas a velocidades elevadas, pero con la solvencia de ir lo más plano en el desarrollo de ellas y con la capacidad de una respuesta franca y sin vicios. Para ello, AMG dispuso de un piso plano en sus bajos, con un deflector o labio delantero que va en su parte baja y se puede ajustar en su inclinación para favorecer la penetración de su figura y favorecer el “pegado” del tren delantero.

En su parte posterior, cuenta con un alerón que está bastante despegado de su estructura y que se puede ajustar en hasta 20°, permitiendo generar una carga aerodinámica que “pega” el auto en su eje trasero al piso a altas velocidades. El material utilizado en la fabricación del capot, puertas, paneles laterales de la carrocería y hasta en el árbol de transmisión o eje cardan, es la fibra de carbono, que es estructuralmente muy resistente y extremadamente liviano. Toda esta ingeniería y tecnología desplegada son necesarios cuando se elevan los registros de velocidad, hasta alcanzar unos 320 km/h. Como se imaginarán, es imperioso disponer de soluciones específicas para alcanzar semejante registro.

En cuanto a las soluciones que se adoptaron en su habitáculo, puedo mencionar que las 2 butacas son del tipo baquet revestida en cuero negro y alcántara con costuras en naranja para resaltar ese toque deportivo. Se encuentran también retoques en fibra de carbono y el deportivo volante AMG recubierto en alcántara. Y en opción se pueden encargar las butacas de tipo baquet pero hechas en fibra de carbono (más livianas), con unos cinturones de seguridad de 4 puntos (de competición), una jaula antivuelco de titanio y la hermosa y muy particular pintura exterior de color Naranja (Orange Magna), que se puede solicitar únicamente en este AMG Black Series.

Para cerrar, deseo transmitir que en no muchas oportunidades uno es impactado visualmente por un vehículo, no sólo por sus líneas generales sino también por las soluciones que enaltecen su silueta, y más allá del color que a algunos puede impresionar, gustar o no, sencillamente quiero manifestar que ha logra sobradamente llamar mi atención, sin descuidar que después de todo el desarrollo de la nota, lo considero como un super deportivo con capacidades impresionantes.

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Alberto Mario Kuchen

Apasionado por los autos. Familiarmente vinculado a este maravilloso mundo y al de las carreras de autos: mi padre que corrió en la década de los años 60 con el seudónimo de Sandokán. Como Ingeniero Mecánico Aeronáutico, la tecnología en pos de la seguridad y la mejora continua, siempre llamó mi atención. Mi compromiso con ustedes para compartir e investigar en todo lo que viene.

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