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Experiencia Subaru para combatir la “Indoorancia”.
La marca japonesa convocó a un evento al aire libre con el objeto de compartir con medios de prensa, funs y “embajadores” de la marca a una experiencia de “exigencia” de 3 de sus productos que integran su portfolio. Fieles a la premisa #combatirlaindoorancia, invitan al público en general a quitarse esa costumbre de utilización de cualquiera de sus vehículos en situaciones diarias de tráfico ajetreado para sacarlos de la rutina y disfrutar del potencial off-road que es capaz de entregar.
Con el motivo central de demostrar la “capacidad off-road” de todos los modelos que comercializa a quienes ya son propietarios y a los que no lo son, e invitar a los “perezosos” que poseen un auto de la marca a salir un poco al aire libre y poder disfrutar no sólo del esparcimiento sino también de la posibilidad de incursionar por caminos no aptos para todos los autos que se venden en nuestro mercado, la empresa SUBARU organizó un evento a través del Grupo Team Experience en el predio lateral al circuito de La Chutana, ubicado a unos 50 kilómetros al sur de la ciudad de Lima, donde lo “desparejo y empinado” formó parte del escenario. Para los que no conocen el terreno donde se llevó a cabo la demostración, imagínense un terreno donde encontramos trocha, zonas de arena suelta y empinadas laderas de cerros que integraban la orografía. Enseguida nos viene a la mente la necesidad de contar con una unidad 4*4, preferentemente del tipo pickup o una camioneta con potencia abundante y suficiente para hacer frente a estos desafíos.
Bueno, presentado el ambiente donde se desarrolló el evento, quiero comentarles qué vehículos puso a disposición la marca para que pudiéramos conocer y apreciar por la destreza de los instructores y luego por nuestra capacidad conductiva, de la capacidad real off-road con que cuentan los autos de la marca. Para ubicarnos en el potencial que ofrece la gama comercializada, todos disponen de una transmisión automática Lineartronic CVT conjuntamente con una transmisión a las cuatro ruedas del tipo permanente denominada Symmetrical All Wheel Drive, cuya tarea es repartir la fuerza necesaria en forma independiente en cada rueda, asistiendo a la mayor demanda y quitando cuando no hace falta. Dicho de otra manera, dispone de una distribución de torque activo. Para las pruebas pusieron a disposición 3 unidades, una de cada segmento identificada para estas tareas: la XV con motor bóxer de 2.0 litros que entrega 154 Hp y un torque de 200 Nm; una Outback con motor bóxer de 2.5 litros que entrega 175 Hp y un torque de 235 Nm; y por último una Forester con motor bóxer de 2.5 litros que entrega 184 Hp y un torque de 239 Nm. El dato de color y distintivo, es que estamos hablando de motores atmosféricamente aspirados, con la disponibilidad de torque progresivo acorde con el aumento de las rpm del motor.
Un detalle que debemos tener en cuenta es que para practicar estas destrezas, es necesario bajar un poco el inflado de los neumáticos, y de esa manera es más accesible para enfrentar el desafío de trepada y circulación por la arena. Quizás todas estas aclaraciones, que son conocidas por muchos, son indispensables para entender el funcionamiento y rendimiento en general de estos vehículos. La primera impresión al llegar al lugar y cuando nos explicaron el tipo de circuito que íbamos a sortear, comenzaron a flotar algunas dudas en nuestras cabezas, sobre todo cuando nos mostraron la inclinación de la ladera del cerro por donde íbamos a trepar, la cual se aproximaba a unos 45°; pero como todo lo que sube debe descender para volver a su posición original, y para colmo con la misma inclinación, debemos observar cual es el desempeño de estas máquinas.
Una vez lanzado el evento, las 3 unidades partieron espaciadas con sus instructores en la primera vuelta explicando algunas técnicas para trepar y soluciones para el caso que los neumáticos pierdan adherencia y por lo tanto no avance, cargadas con 3 pasajeros. Y una vez concluído el recorrido, los acompañantes se rotaron para poder hacer el mismo circuito supervisados por el instructor. Con gran sorpresa pudimos observar que los vehículos treparon, sin dificultades al comienzo ya que el piso estaba firme, pero a medida que se repetían los ascensos, la trocha empezó a desmejorar con formación de huecos y suelta de piedras y tierra; esta situación obligó a poner al descubierto la destreza de los conductores, ya que en momentos la trepada se interrumpía, pero con técnicas y artilugios lograba zafar de la situación embarazosa.
Estas pruebas que pudimos concretar puso al descubierto la real “Capacidad” que disponen estos vehículos, y que sólo se puede apreciar cuando uno puede llevarlas a cabo, y no que te lo cuenten. No existe mejor forma de sacarse la duda de la veracidad de lo comentado, cuando uno puede comprobar por su cuenta lo que te comentan como “capacidad”. Sin dudas que más de uno de nosotros que tuvimos la suerte de ser invitados por la empresa al evento, pudimos comprobar el potencial que disponen los SUBARU cuando se los exige en estas circunstancias.