Para los nostálgicos del mítico Renault 4.

Si bien hablamos de otra parte de nuestra historia automovilística, sin dudas podemos hacer algún aporte histórico ya que casi todos teníamos alguna persona cercana que tuvo un Renault 4L. Sin comparaciones, y con mucha nostalgia, siempre ha sido considerado como un auto muy simple que nunca te dejaba y te llevaba a todos lados. Ya cuando en el siglo pasado se tomó la decisión de discontinuar su historia (hace aproximadamente unos 30 años), siempre se intentó revivir su imagen y su presencia en el mercado con un auto más moderno y tecnológico. Pero tuvo que pasar muchas décadas hasta que la firma Gala tome la decisión de revivir el “espíritu” de la leyenda, con un diseño exterior muy moderno y con la toda la tecnología disponible a la fecha, con la salvedad que su resurgimiento toma la posta con la motricidad totalmente eléctrica. Este nuevo modelo es llamado Renault 4 E-Tech, que se incorpora como un nuevo integrante del portfolio francés de los vehículos totalmente eléctricos, que va a ver la luz comercial probablemente durante el verano entrante en el Viejo Continente.

Paso a comentarles datos que ya son oficiales: su imagen exterior tiene una longitud total de 4.14 metros, un ancho de 1.8 metros, la altura alcanza los 1.57 metros y una amplia distancia entre ejes de 2.62 metros; la maletera dispone de 420 litros ampliables al rebatir los respaldares traseros, y si se rebate el asiento delantero del acompañante, se dispone de un largo interior aprovechable de hasta 2.2 metros para poder trasladar objetos largos. Su despeje al suelo es de unos 18 centímetros, lo que le confiere un aire de cuasi SUV. Presentado de esta manera y viendo su figura desde su lateral, apreciamos que los voladizos delantero y trasero son muy acotados, generando una imagen de vehículo compacto y muy robusto, pudiendo ofrecer una amplitud de habitáculo muy buena, confirmando comodidad para poder ubicar las piernas de los pasajeros traseros. Algunas características de este diseño exterior rememoran varios aspectos del antiguo 4L, por supuesto con incidencia en algunos detalles, pero que evocan lo retro con pinceladas de modernidad: como ejemplo se puede mencionar a la parte frontal con la parrilla y la forma redonda de las ópticas, la forma de los guardabarros delanteros, la línea lateral, la forma de la ventanilla trasera ubicada detrás del tercer parante y la forma y diseño del portón trasero y las ópticas traseras verticales.

Al mencionar esto, hago referencia de algunas características que pasan a ser comunes en los autos eléctricos modernos, donde se aprovecha al máximo la habitabilidad y se mejora el ingreso de las personas debido a la colocación de la batería en la parte inferior del auto, lo que genera una mayor altura en la fijación de las butacas respecto al suelo, sin olvidar que el piso es prácticamente plano, cosa que se agradece en especial para comodidad de los pasajeros de la segunda fila de asientos.

Por supuesto, que la comodidad del pasajero trasero que es relativamente alto va a depender de la inclinación descendente y de la terminación superior posterior del techo. Regresando al R–4L, la reinterpretación de este nuevo vehículo con estilo retro que pertenece al segmento B incorpora mucha tecnología como lo hace con los productos recientemente ofrecidos por la marca, como es el caso del nuevo Renault 5 E-Tech.

Respecto a su propulsión que por ahora es exclusivamente en el eje delantero, inicialmente va a contar con dos opciones: un motor eléctrico que entrega 120 CV alimentado con una batería de 40 Kwh de capacidad y una autonomía probable de 300 kilómetros, y la segunda opción con 1 motor eléctrico que entrega 150 CV alimentado de una batería de 54 Kwh de capacidad con una entrega de autonomía de aproximadamente 400 kilómetros. Las 2 opciones pueden llegar a preferirse o referenciarse en función del uso diario que vamos a darle: uso citadino o uso de ruta con destino cercano. La recarga de las baterías admite una potencia de hasta 80 Kw para la más chica, y de hasta 100 Kw la más grande en corriente continua, mientras que en corriente alterna admite hasta 11 Kw. Pueden incorporar un sistema de control de tracción a las ruedas denominado “Extended Grid” con modos de conducción para nieve o todoterreno, llevando también neumáticos mixtos para poder circular fuera del asfalto.

Dentro del habitáculo vemos practicidad, modernidad y confort, con el uso de materiales de buena calidad y cantidad de materiales reciclados. Y con algunos detalles al margen, la disposición y diseño del tablero general (salpicadero) con la presentación de las pantallas digitales de instrumentos de 10.1 pulgadas y de 10 pulgadas para el infoentretenimiento, el volante de dirección y la disposición de la consola central, son prácticamente las mismas que las que encontramos en el Renault 5 E-Tech. El sistema de infoentretenimiento es compatible con Google, con la utilización del avatar virtual “Reno” con el uso del Chat GPT, con funciones avanzadas como el control por voz y el sistema de navegación. Para ayudar al conductor, la firma destaca la disponibilidad de 26 ayudas a la conducción. Por el momento, Renault anunció 3 versiones de equipamiento: la inicial es la Evolution, la intermedia la Techno y la superior la Iconic. Esta última ofrece la opción de la función One Pedal, que facilita al conductor optimizar y maximizar el frenado regenerativo de la batería, usando prácticamente en forma exclusiva el pedal del acelerador en el uso diario, salvo en casos de extrema necesidad de frenado.

La construcción de este R4 E-Tech se efectuará en la planta que Renault tiene en Maubeuge (Francia), donde ensamblará el vehículo recibiendo los motores eléctricos de su propia planta ubicada en Cleón y las baterías de la factoría ubicada en Douai; para el ensamblado general empleará la misma plataforma que se utiliza para el recientemente presentado Renault 5 E-Tech. A modo de cierre, quiero manifestar que este nuevo producto galo promete una mayor democratización de vehículos eléctricos de poco porte, incidiendo favorablemente en la decisión de aquellas personas que utilicen mucho el vehículo con uso citadino sin especificar el grupo etario, como así también el caso de familias jóvenes con niños que necesiten movilidad y practicidad en la locomoción diaria.