Restyling del Audi Q7 2020.

Nadie desconoce el hecho de tener que incorporar en los ciclos de media vida de una generación, todos los adelantos ya incorporados en productos de la familia, como así también algunos que son probados y mejorados para ser utilizados en una futura generación. Hace poco tiempo hemos sido testigos de la presentación del totalmente nuevo Audi Q8, del cual hemos quedado muy bién impresionados por los logros de un vehículo muy moderno, marcando en cierta forma un estilo que marcaría el rumbo de las líneas que nos podríamos encontrar en un futuro inmediato en las nuevas generaciones de los distintos modelos. Pues bien, en este caso y por tratarse de un restyling, este nuevo Q7 mantiene en esencia los rasgos de la familia, manteniendo el lineamiento general del anterior en lo que respecto a su exterior; pero no ocurre lo mismo cuando nos aventuramos en el interior, ya que podemos apreciar un salto considerable de calidad. Para ir detallando los cambios exteriores, nos referiremos al frente, que es uno de los 2 lugares más renovados: recibe una parrilla del tipo Single Frame pero bastante más grande, resaltada en su contorno por una franja cromada con un poco más de cuerpo. Por otro lado, las ópticas fueron rediseñadas y hasta se las puede solicitar con la tecnología HD Matrix LED. Por supuesto, las líneas del paragolpes fueron redefinidos, y se ubicaron en los laterales unas tomas de aire de mayor volumen. En esta vista, podemos observar la influencia que aportaron los rasgos del nuevo Q8.

Su lateral conserva las mismas líneas, pero como ocurre en estos casos, vamos a encontrar unos nuevos aros y un rediseño de los plásticos inferiores que recorren su perímetro bajo al igual que en sus pasarruedas. Y en su parte trasera, si bien es el segundo lugar más retocado, el portón conserva su tamaño, pero aparecen unas nuevas ópticas con acrílicos modernos, de forma más alargada, y que a la vez se encuentran unidas por una franja central del tipo cromada, que le brinda un aspecto más robusto y ancho. Su paragolpes se modificó e incorporó un difusor central de color gris satinado y un par de salidas de escape ancladas en los extremos, adoptando una forma del estilo rectangular. El aspecto general ha sido mejorado y le asienta muy bien.

Pero donde se destacan los cambios mayúsculos, es dentro del habitáculo. Y definitivamente éstos son muy radicales, ya que deberíamos remitirnos al recientemente presentado Audi Q8 para entender de lo que estoy hablando. Es más, es bastante similar el diseño, por lo que cabe mencionar que el salto tecnológico es elevado. En primera instancia, vamos a encontrar toda la información en pantallas digitales de muy generosas dimensiones. Sentado en el puesto del conductor, éste dispone de la característica pantalla con el Audi Virtual Cockpit con nuevas funciones de visualización y de configuración. Y con el mismo tipo de diseño, se cuenta con el tablero general totalmente rediseñado y con 2 pantallas centrales, ubicadas debajo de la línea de aireadores superiores, levemente inclinadas una con respecto a la otra; la superior es la que gobierna todo lo vinculado al infoentretenimiento, donde los sistemas MMI Navigation Plus y el Audi Connect recibieron una profunda actualización, con nuevas funciones para optimizar la información y la comunicación. Para ello cuentan con LTE Advanced, un punto de acceso a Wi-Fi, control de voz de Amazon basado en la nube con la ayuda del asistente Alexa, y además la info de tráfico pero en tiempo real. Excelente. Además, la pantalla inferior sirve para manejar y regular el sistema de climatización. Cabe mencionar, que los materiales y la calidad de terminación han sido optimizados con respecto al del acabado anterior. Dado el tamaño y la habitabilidad interior de este SUV, cuenta con la posibilidad de adquirirlo con 5 o 7 plazas.

Con respecto a la oferta de motores, no van a encontrarse opciones diferentes a las actuales, pero en todos los casos, tanto gasolinero como petroleros, contarán con una asistencia híbrida a 48 voltios. Es de esperar, ya que no se oficializaron datos al respecto, que las potencias van a ser superiores a las que actualmente disponemos. Irán hermanados con la transmisión automática Tiptronic de 8 relaciones y tracción a las 4 ruedas. Se modificó la puesta a punto del chasis, la altura del vehículo, se incorporó a la amortiguación un sistema de estabilización de balanceo y la particularidad de la direccionalidad en las 4 ruedas. También puede pedirse la suspensión neumática adaptativa, la que le permite un manejo muy equilibrado. Pero después de su inicio de comercialización prevista para el próximo setiembre, y como es de esperar, anticipan una producción de una versión híbrida enchufable.

Sin dudas, la marca alemana hace una apuesta fuerte en el segmento de SUV´s grandes premium, actualizando el vehículo que en su oportunidad fue considerado como el buque insignia de la firma, tratando de pelear el podio con sus oponentes con un producto moderno, de alta calidad y de excelentes prestaciones.