La empresa CATL está a punto de desvelar una sorpresa de alto impacto.

Esta nueva tecnología que desarrolló CATL, podría ser considerada como revolucionaria desde el punto de vista absolutamente práctico, puesto que está a punto de lanzar una estructura que se puede asociar al ejemplo que vemos en un monopatín; con una mirada abierta, podríamos asociar esta realidad a presentarse en el mercado automotriz, como una alternativa válida para las empresas que son las que tienen a su cargo el desarrollo global de un vehículo en todas sus partes. Esto obviamente involucra la inversión de dinero desde el origen mismo de un vehículo, tanto para la investigación, desarrollo y la fabricación de todos los elementos constitutivos del mismo, con la excepción que actualmente visualizamos dentro del ámbito de la electrificación, donde en este caso, los fabricantes recurren a empresas específicas que les proveen las baterías eléctricas, si bien hay algunas empresas que alcanzaron su propio desarrollo y abastecimiento logístico. Dicho esto, CATL generó una plataforma eléctrica que facilita y diversifica mucho su utilización y aplicación en muchos vehículos de segmentos diferentes donde las marcas de vehículos tradicionales deberían ocuparse solamente del diseño de la carrocería que la marca desea, con la debida adaptación del habitáculo. Aportando un comentario con un viso de carácter lógico y hasta con sentido práctico, las marcas y hasta incluso los grupos que aglutinan diferentes marcas de automóviles, todas en general y en ese afán de poder disponer de beneficios del tipo económico, apelan a la conocida estandarización de componentes de diferentes elementos constitutivos de un vehículo, favoreciendo primordialmente la disminución de costos a la hora de la fabricación; si a esta consideración, le incorporamos este nuevo desarrollo de la empresa CATL, donde “la patineta” genérica totalmente eléctrica facilitaría los desarrollos generales y lo esencial es el hermanado entre ambas estructuras como mencioné en párrafos superiores. Pero más allá de la capacidad de adaptar para “hermanar” estructuras, lo relevante de los datos aportados por la empresa china, pasa por los avances contundentes en la investigación y desarrollo de las baterías que viene ofreciendo al mercado con tecnologías cada vez más sofisticadas y sobretodo eficientes. En resumen, el trabajo resultante de CATL consiste en aportar pilas con un excelente resultado. Pero ahondando un poco más en lo que respecta a la “patineta o monopatín”, en función por la data recogida y apenas aportada, CATL producirá una estructura cuyo diseño final será determinado en conjunto con la marca requirente de la misma, a la cual denominó CIIC (CATL Integrated Intelligent Chasis). En líneas generales consta de una construcción integral del chasis bajo, donde viene incorporada la batería eléctrica entre los 2 ejes que, por supuesto consta de 4 ruedas, y un motor en uno de los ejes. Esto conceptualmente habilitaría la posibilidad de utilización de la estructura en un gran abanico de usos, o lo que es lo mismo, de carácter multipropósito. Por otro lado, CATL dio a conocer un consumo energético (de laboratorio)que ronda los 10.5 Kwh para recorrer 100 kilómetros, y con una teórica autonomía de 1.000 kilómetros. Como siempre me permito aclarar, más allá que son datos de ensayos que realizó el fabricante, las condiciones suelen ser diferentes a las de uso cotidiano, y con valores que reflejan rendimientos menores, ya que las condiciones a las que son sometidos resultan muy diferentes a las ideales. CATL asegura una eficiencia del paquete de las baterías que ronda el 75%, y como su estructura eléctrica es de alta potencia, le permite recuperar unos 300 kilómetros de autonomía en tan sólo 5 minutos. Claro, todo esto se cumple en condiciones que son ideales, ya que se debería contar con un super cargador. Es oportuno mencionar que en general, el desarrollo total del vehículo corre por cuenta del fabricante, y la provisión de la batería eléctrica corre por cuenta de empresas fabricantes de éstas, como es el caso de CATL.

Bueno, como desarrollo general se puede decir que es totalmente novedoso, y como tal, resulta una solución aportada que llamaría a revolucionar a la industria de los autos eléctricos. Todo va a depender cómo logran interpretar las diferentes marcas de vehículos esta posibilidad de amalgamar sus carrocerías y habitáculos con diseños y estilos propios, con la posibilidad de amalgamar las unidades propulsoras eléctricas que CATL les proveería. Esta alternativa puede dar mucho que hablar y lo veremos en el tiempo.