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Gazoo Racing dice presente en la nueva estrella de Toyota.

Como lo había anticipado hace unos meses, el departamento deportivo de la marca Toyota había anticipado que iba trabajar sobre el nuevo producto que se presentó a nivel global: el Corolla Cross.

Antes que nada, es importante resaltar que Gazoo Racing tiene dos niveles de preparación de vehículos de la marca: uno de ellos resalta el hecho del aspecto o “look” más deportivo que le puede imprimir, mientras que el más extremo abarca un trabajo más importante en lo que respecta al “corazón” del auto (el motor) y todo lo que involucra la puesta a punto del vehículo para optimizar el rendimiento dinámico, aparte de los arreglos estéticos y aerodinámicos para tal fin. Pero en esta oportunidad, y como lo amerita el vehículo de referencia, este C-SUV de Toyota que hace poco ha sido presentado a nivel global, y del cual sólo se observa una gran aceptación por el nivel de ventas en las diferentes regiones en las que se comercializa, hizo un trabajo del primer nivel donde la parte frontal se transformó en el centro de atención. En esta ocasión, Toyota acaba de presentar en Taiwán al nuevo Corolla Cross GR-Sport, la que pasa a ser la versión deportiva de este exitoso SUV de la marca. Si bien inicialmente los primeros en recibir esta versión son los mercados asiáticos, en breve seguramente van a hacerse presentes en esta región, ya que en el país hermano de Brasil es donde se están fabricando las versiones comercializadas en Latinoamérica. Pero paso a comentarles un poco más al respecto: si bien los cambios no son tan profundos, más allá del nuevo diseño de su parte frontal, los ingenieros han estado trabajando en el desenvolvimiento dinámico. Para ello han recalibrado la suspensión, colocando unos amortiguadores específicos y cambiando las barras estabilizadoras por unas de mayor calibre. El paquete de calibración, cierra con una puesta a punto de la dirección que es eléctricamente asistida, para que la sensibilidad del conductor pueda disponer de una dirección con tacto un poco más deportivo: es decir, más comunicativa.

Respecto a los cambios estéticos recibidos, la parrilla frontal central es de menor tamaño, con marco y entramado de la rejilla en negro, y los extremos laterales de ésta terminan en unas aletas que continúan un tramo hacia los extremos para encastrar en la parte baja de las ópticas que no han sido modificadas. Más abajo, el paragolpes fue adaptado y queda “separado” visualmente de la parte superior con una delgada hendidura horizontal plástica en color negro que simula una partición de áreas. Ésta se extiende hasta los extremos, comunicando las tomas de aire “ciegas” de forma irregular donde ubica en su parte superior a unos neblineros de formato redondo. A su vez, incorpora la parrilla baja central en forma trapezoidal. Y si bien en cuanto a gustos no hay nada escrito y todo pasa a ser subjetivo, desde mi punto de vista esta modificación le asienta mejor. En su parte trasera, sólo se observa una leve modificación del paragolpes. Otro detalle a resaltar es que emplea un color bitono, diferenciando el color del techo pintado en negro del resto de la carrocería. En el resto del vehículo no apreciamos más cambios, porque hasta incluso se ven las mismas llantas que en las versiones convencionales.

Dentro de su habitáculo sólo vemos detalles en costuras en color rojo y algunos logos GR en blanco, negro y rojo ubicados en distintos lugares: volante, instrumental y el botón de encendido. Por último, el tapizado interior del techo es en color negro. En cuanto a la dotación tecnológica, viene equipada como la versión tope de gama, contando con el Toyota Safety Sense. Otro aspecto que no sufre modificaciones es el de las plantas motrices, ya que puede venir montado con 3 variantes: el motor de 1.8 litros y 140 CV de potencia, que no se comercializa en todas las regiones; el motor de 2.0 litros Dynamic Force de 170 CV y la versión híbrida con el motor 1.8 litros de ciclo Atkinson y el motor eléctrico que entregan 122 CV. Las cajas de cambio son las mismas: manual de 6 marchas, la e-CVT para la versión híbrida y la CVT de 10 marchas simuladas con un engranaje de primera marcha bien larga.

En resumen, estas son las diferencias que encontramos a través de la información que hemos tenido acceso, y sin dudas va a resultar una opción muy apetecible gracias a su retrabajo estético en la parte delantera que le confiere un aspecto más deportivo y que probablemente mejorará sustancialmente en el aspecto dinámico. Solo vamos a tener que esperar hasta el año entrante para saber si el diseño que se va a aplicar al modelo fabricado en Brasil es igual o va a presentar algunas adaptaciones regionales.   

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Alberto Mario Kuchen

Apasionado por los autos. Familiarmente vinculado a este maravilloso mundo y al de las carreras de autos: mi padre que corrió en la década de los años 60 con el seudónimo de Sandokán. Como Ingeniero Mecánico Aeronáutico, la tecnología en pos de la seguridad y la mejora continua, siempre llamó mi atención. Mi compromiso con ustedes para compartir e investigar en todo lo que viene.

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