La quinta generación del Subaru WRX ofrece buena potencia, es más tecnológico y con diseño continuista.

Para aquellos que siempre han encontrado en el Subaru WRX un referente en conducción con estilo deportivo, caja manual y tracción a las cuatro ruedas (AWD), desde ahora podrán tener como referente a un vehículo que se actualiza no sólo en imagen y potencia, sino con el aporte necesario de tecnología que lo ubica para batallar en esos momentos de exigencia como en el uso citadino. Claro está que los que “aman” a este vehículo ícono de la marca, seguramente se van a sentir cómodos con esta noticia, pese a las crecientes exigencias de desarrollos de autos electrificados: por ello Subaru apuesta por mantener viva la adrenalina de sus fans. Sin dudas no los va a decepcionar, sino que por el contrario decidió brindarles otra oportunidad. Este sedán deportivo se actualiza en aspectos técnicos, pero tampoco se “olvida” de darle un toque de refresh a su aspecto exterior, pero sin quitarse de encima ese mote de “continuista” en sus trazos. Sin embargo, apela a algunos artilugios que lo rejuvenecen.

Con la base del acabado denominado GT, encontramos la clásica entrada de aire ubicada en el centro del capot, la nueva parrilla de formato hexagonal que luce una rejilla trabajada con formato en panel de abeja. Las ópticas con tecnología LED son más alargadas, dándole una imagen ya replicada en otros productos de la marca. Su lateral nos muestra unos plásticos con color brillante que recorren todo el perímetro bajo del auto; en cuanto a los pasarruedas, éstos en particular están protegidos por unos plásticos que tienen una forma definida por tramos a lo largo de su recorrido, generando un efecto visual más robusto.

Su zaga presenta un alerón incorporado en la tapa del baúl, unas nuevas ópticas, un trabajado deflector inferior y dos dobles salidas de escape en cada lado. El conjunto queda muy bonito. En su rediseño, estructuralmente se emplearon materiales más resistentes y mejoraron las técnicas de armado en la Plataforma Global de Subaru, que le dan una rigidez torsional que se ve incrementada en un 28%. También desplazaron el centro de gravedad más abajo, mejorando su desempeño en curvas y exigencias dinámicas.

Como planta motriz utiliza el conocido motor de 4 cilindros opuestos de 2.4 litros de cilindrada turboalimentados que entrega 275 CV y un par motor de 345 Nm disponibles entre las 2.000 y 5.200 RPM. Puede ir hermanado con una caja manual de 6 marchas que fue optimizada en sus relaciones, o sino con una nueva caja automática de 8 marchas del tipo secuencial denominada Subaru Performance. La marca hace hincapié en la evolución de esta caja y en el desempeño en general, optimizando tanto las marchas ascendentes como descendentes. Como es tradición en la marca, la transmisión es acompañada por la tracción integral con la vectorización de par a las ruedas (la Subaru Symmetrical All-Wheel Drive). Para mejorar el desempeño dinámico, viene con una suspensión electrónica adaptativa de tres posiciones: Comfort, Normal y Sport. De esta manera, queda claro que el conductor puede adaptar el rendimiento de acuerdo a las exigencias que le imprima, además de contar con modos de conducción (el SI-Drive), que van variando y adaptando los distintos parámetros de la gestión del motor, la suspensión y hasta el endurecimiento de la dirección. Todo este paquete viene acompañado con una nueva puesta a punto y anclaje de la barra estabilizadora trasera, la cual va ligada directamente en el chasis, minimizando el balanceo en curvas. Esta mejora en la performance viene de la mano con una mejora en el sistema de frenado que utiliza discos ventilados en ambos ejes. Estéticamente luce unas llantas que pueden ser de 17 o 18 pulgadas en acabado mate (satinado).

En el habitáculo, como es lógico, domina la presencia del color negro con detalles en rojo, tanto en las costuras como en los cabezales delanteros, que identifica muy claro que se trata de un WRX. Dependiendo del acabado que se compre, el GT incluye unas butacas delanteras deportivas marca Recaro. El conductor va a contar con un nuevo volante deportivo multifunción con la parte baja ligeramente aplanada y la presencia del aluminio en las pedaleras y apoya pié izquierdo para descanso. Dentro de las actualizaciones tecnológicas, vemos que tiene una enorme pantalla central táctil-digital de 11.6 pulgadas ubicada en forma vertical, con el sistema de infoentretenimiento Starlink compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Como es característica del diseño y distribución el tablero general, los aireadores centrales van franqueando la misma. El sistema de sonido viene integrado por 11 bocinas diseñado por Harman Kardon, con una potencia declarada de 504 Vatios. Por último, una característica de esta marca es la de aportar toda la seguridad posible a sus productos, y en esta oportunidad tampoco defrauda: dispone del sistema integrado EyeSight de última generación, que brinda toda la seguridad activa desarrollada por la marca, partiendo del sistema de control de velocidad crucero adaptativo con todos los sistemas satélites que aportan datos para su accionar, incluyendo por supuesto, el frenado autónomo de emergencia, asistente de carril activo, tráfico cruzado, punto ciego, entre otros.

Resumiendo, con este WRX Subaru quiso mantener vigente esa esencia de deportividad expresada en su sedán ícono que construyó desde hace varias décadas con su exitosa participación en rallyes, tejiendo su reputación y vasta historia gracias a su desempeño. Este producto no se debe olvidar.