Coincidiendo con la celebración del tradicional y reconocido Carnaval que se lleva a cabo en la ciudad de Río de Janeiro, Volkswagen celebró la presentación oficial de su nuevo compacto B-SUV TERA, que fabricará en territorio brasileño en la Planta de Taubaté, utilizando la plataforma MQB-A0. Sin lugar a duda, el TERA está orientado a cubrir requerimientos y necesidades adaptadas a los desafíos de los suelos latinoamericanos, que es un mercado que empieza a recibir muchas ofertas, y por cierto variadas, de la industria asiática. Por suerte para nosotros, los usuarios, este detalle que no es menor genera mayor competitividad, obligando a las marcas a ofrecer vehículos de mayor calidad, con mayor equipamiento y una oferta de tecnología de punta que ya pasa a ser algo común y muy demandado a la hora de la decisión. En virtud de este comentario, me arriesgo a decir que la puja por obtener una porción mayor del mercado por parte de cada contrincante nos beneficia siempre y cuanto las marcas entiendan que la baja y adecuación de los precios de venta pasen a estar a la altura de los bolsillos.

Apreciando su estética, estamos ante la presencia de un diseño que aporta muchas características modernas y un diseño general armonioso y proporcionado en cuanto a la distribución de sus volúmenes, contando con los detalles necesarios para su definición como un SUV con “ciertas capacidades” de incursión fuera del asfalto, como lo son los tradicionales protectores de plásticos duros en color negro que acompañan todo el perímetro bajo de la carrocería y los pasarruedas. La elección de ruedas de diámetro considerable, le dan un porte que genera visualmente robustez y resalta el estilo “off-road” que la marca le quiere imprimir, junto a las barras de techo. Su parte frontal nos muestra el nuevo ADN de diseño de VW que capitaliza una delgada parrilla superior interrumpida en su parte media por el gran logo, y termina con un diseño de ópticas nuevo que incorpora una firma de led innovadora. Más abajo vemos una gran parrilla de plástico con diseño elaborado, y las características áreas donde pueden alojarse unas “branquias”laterales también en plástico negro, que le da un espíritu algo deportivo.

Su lateral nos muestra una considerable superficie vidriada, una cintura alta con líneas de tensión que remarcan los hombros en la parte superior de los guardabarros generando un efecto de mayor volumen. Su zaga nos muestra una superficie rectangular acrílica oscura con logo enorme en su centro, y justo antes de hermanar y ensamblar con las ópticas traseras, se ensancha la superficie para incorporarlas en su trayectoria. El diseño del paragolpes trasero ofrece un ángulo de ataque considerable que le facilita la salida de terrenos accidentados.

El interior del habitáculo muestra un amplio espacio para los ocupantes que cuentan con materiales de buena calidad que ofrecen un ambiente moderno con butacas ergonómicas. Su maletera es bastante generosa acorde a las dimensiones generales del vehículo. El conductor cuenta con una pantalla de instrumentos totalmente digital y configurable, y la pantalla central de infoentretenimiento de 10 pulgadas cuenta con navegador, control de la climatización (digital) y conectividad compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Un poco relacionado con lo que mencioné al comienzo de la nota, ante la demanda generada, era de esperar que el TERA ofrezca lo último en tecnología y con una conectividad a la altura, cosa que hace. En cuanto a la seguridad del vehículo y lo que ofrece a todos los ocupantes, viene equipado con los asistentes a la conducción de último desarrollo: frenado autónomo de emergencia, mantenimiento del carril, control de velocidad de crucero adaptativo, con asistente de punto ciego. Detenido, cuenta con cámara de 360 grados, y junto a los sensores de proximidad de estacionamiento, entregan una ayuda muy valiosa al conductor en momentos de maniobra acotada en espacios reducidos y con objetos cercanos al vehículo (como es el caso de las playas de estacionamiento).

Respecto a la planta motriz que equipará al TERA, seguramente serán las variantes que encontramos en su hermano más grande, el Nivus: motor tricilíndrico 1.0 litros turbo 170 TSI que entrega 101 CV y va hermanado con una caja manual de 5 marchas; y el mismo motor, pero 200 TSI que entrega 116 CV acoplado a una caja automática de 6 marchas.

En la familia VW, su posicionamiento está por debajo del Nivus, pero por encima del Polo. Respecto a su competencia, se encontrará frente al Fiat Pulse y al Renault Kardian. Sin dudas viene a cubrir un espacio muy demandado pero competitivo a la vez, así que habrá que esperar un poco para ver resultados.

A modo de cierre, considero que VW nos ofrece un vehículo compacto del tipo B-SUV que el consumidor promedio anhela y demanda con preferencia a los ya poco vistos y ofrecidos hatchback. Estéticamente es un auto bonito y armonioso en estilo, que irrumpe en un mercado donde la sociedad quiere este tipo de producto por gustos y necesidades diarias, con una intención de poder salir a pasear y hurgar un poquito en el off-road ligero.