No hay que distraerse mucho, porque las novedades de vehículos nuevos que se van presentando en el mercado automotor nos llaman la atención constantemente, y en especial los totalmente eléctricos, marcando un recorrido en esa dirección haciéndolo de forma persistente y elevando la vara de calidad y tecnología en forma contundente. La respuesta lógica al poder apreciar este tipo de auto es el de admiración, ya que siempre expresan y representan un giro de exigencia mayor en ese afán de captar la atención de un público que mira con ansias la modernidad y la sofisticación. Para ello las marcas y en especial las llamadas premium, nos transportan a un escenario que evoluciona muy rápidamente con avances que impactan significativamente en la sana contienda entre competidores de fuste.

Volvo se fue consolidando en una de esas marcas que marcaron su propio estilo de vehículos muy seguros y bonitos. Y pese a que el viejo continente ha tenido que replantearse algunas metas en cuanto a la implementación del parque automotor con preponderancia en el vehículo eléctrico, las circunstancias han llevado a muchas marcas a continuar por un tiempo más con la locomoción de motores alternativos; Volvo no está ajena a ello, por lo tanto, decidió no abandonar la utilización de éstos para seguir nutriendo a su portfolio con algunas versiones híbridas enchufables. Si bien hace poco se ha oficializado a su nuevo y más grande SUV EX-90, ahora lo hace con su sedán de mayor porte confirmando su estilo refinado, incorporando en su volumen trasero una terminación de caída de línea de techo en formato liftback.

Este totalmente nuevo ES-90 (ES: Electric Sedan) hace gala de un despliegue de confort, seguridad y tecnología con los más sofisticados sistemas de asistencia a la conducción. Se diferencia con su hermano con propulsión con motor alternativo, no sólo en la sigla E-90, sino que utiliza la misma plataforma de construcción que el SUV EX-90: la SPA2. Dentro de sus capacidades eléctricas, incorpora una arquitectura eléctrica de 800 Voltios, duplicando la del SUV EX-90. Esta capacidad le permite realizar recargas eléctricas ultrarrápidas en los super cargadores de corriente continua que disponen de una potencia de hasta 350 Kw. Esta característica le permite recuperar una autonomía de casi 300 kilómetros en tan solo 10 minutos: muy interesante. En cuanto a las potencias ofrecidas, encontramos versiones que van desde los 329 (con un motor eléctrico en el eje trasero) hasta los 670 CV (con 2 motores eléctricos, uno en cada eje), y una posible autonomía (según el estilo de conducción y condiciones exteriores) de hasta 700 kilómetros, de acuerdo con el ciclo WLTP, lo que asegura una mejora sustancial en este aspecto.

Respecto a la versión de 2 motores, ofrecen 2 alternativas: el Twin Motor de 442 CV y el Twin Motor Performance que entrega 670 CV, cuya aceleración es de 3.9 segundos de 0 a 100 km/h. Estas 2 últimas alternativas son alimentadas por una batería eléctrica de 102 Kwh utilizables, mientras que la versión de un solo motor (329 CV), dispone de una batería de 88 Kwh utilizables, permitiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 6.7 segundos. Como hace un tiempo a la fecha, la marca Volvo optó por fijar una velocidad máxima de 180 km/h para sus vehículos, haciendo hincapié en robustecer la seguridad de los ocupantes al considerar que una cifra mayor no es necesaria ni relevante por cuestiones de seguridad y por velocidades permitidas de circulación.

En cuanto al aspecto estético de su figura, lo más destacado es el remate posterior, ya que su terminación del tipo liftback facilita la presencia de una puerta trasera de apertura vertical generando un mejor aprovechamiento y acceso al espacio para la carga, que dispone de una capacidad de 424 litros y aumentables hasta los 733 litros al rebatir los respaldares de la segunda fila de asientos.

En esta oportunidad, al no contar con un motor de combustión interna en el vano motor, dispone de un espacio pequeño de 22 litros que es conocido con el nombre de “frunk” o baúl frontal. Si bien no los encontramos en todos los vehículos eléctricos, este ES-90 lo ofrece y resulta útil para ubicar pequeñas maletas u objetos, y hasta incluso los cables para recargar la batería.

Respecto a su habitáculo, es enorme y extremadamente cómodo, sobre todo gracias a los 3.1 metros de distancia entre ejes. El estilo de ambientación y distribución es minimalista, como es común encontrarlo en su portfolio en general. Destaca en la parte central del tablero una enorme pantalla digital de 14.5 pulgadas que conforman el sistema de multimedia cuya plataforma está impulsada por Qualcomm Cockpit con Google Maps, Google Play y Google Assistant con una conectividad de 5G. La información para el conductor se complementa con una pantalla digital de 10 pulgadas de forma rectangular, y por supuesto, con el head up display que visualiza información en el parabrisas.

El confort para los pasajeros es impresionante: climatizador de 4 zonas, techo panorámico con protección UV del 99.9% con regulación electrocrómica de transparencia del cristal, y una insonorización de cabina muy lograda. El trayecto puede ser reconfortante gracias a un equipo de audio premium que lleva la firma de Bowers & Wilkins con 25 bocinas y tecnología Dolby Atmos: supremo. Otro aspecto por destacar es la batería de sistemas de asistencia al conductor, que cuenta con un Lidar, 5 radares, 7 cámaras y 12 sensores ultrasónicos que conforman un paquete moderno y muy tecnológico, que eleva la vara de calificación en seguridad. El sistema complementa información de seguimiento de atención del conductor al detectar distracciones para así tomar medidas correctivas para mantener la seguridad.

Como observamos, el nivel de sofisticación es muy elevado, lo que ubica a este ES-90 en un lugar de privilegio que podrán disfrutar quienes decidan adquirir un sedán de grandes dimensiones con propulsión totalmente eléctrica y una muy completa batería tecnológica de punta, que lo posicionan en un lugar de podio. Es probable que a nuestra región tarde en llegar, pero para el que tenga la posibilidad de disfrutarlo, no se arrepentirá.