Ya conocemos al nuevo Audi RS3: Un verdadero exponente deportivo.

A este nuevo modelo se lo podrá ver en los concesionarios en pocos meses con las 2 tradicionales presentaciones de carrocerías: como Sportback o como sedán. Ahí el gusto personal es el que orientará la decisión. Lo que puedo comentarles, es que en esta oportunidad estará equipado con el conocido motor de 2.5 TFSI, pero con una entrega de potencia de 400 CV. Queda claro que con este potencial pasa a convertirse en un rival directo del Mercedes AMG A-45 S. Para distinguirlo de su hermano S3, lleva una enorme parrilla Singleframe que fue rediseñada, como lo amerita la situación. Las ópticas cuentan con tecnología Led, aunque puede optarse por la tecnología de Led Matricial. En cuanto a las luces intermitentes, son de funcionamiento dinámico. En su lateral se observa la incorporación de unas branquias “reales” de circulación de aire, que están ubicadas justo por detrás del guardabarros delantero. Las llantas de 19 pulgadas tienen un diseño de serie con diez rayos, pudiéndose optar por un diseño específico de cinco rayos. Y si bien la marca no brindó sus medidas de forma oficial, destacó que hubo un incremento en el ancho de sus ejes: en el delantero creció unos 33 milímetros, mientras que en la versión Sportback su eje trasero solo aumenta 10 milímetros. Si bien son medidas que parecen imperceptibles, seguramente aportan lo suyo a la hora del desenvolvimiento dinámico.

En cuanto a su habitáculo, la atmósfera es totalmente deportiva: volante deportivo RS achatado de tres rayos con la “marca” opcional ubicada en posición media superior, pudiendo optarse por el volante de dirección totalmente redondo. El tablero de instrumentos es totalmente digital, compuesto por el Audi Virtual Cockpit Plus de 12.3 pulgadas. A su costado, está ubicada la pantalla central digital de 10.1 pulgadas. Para esta versión, Audi presenta en ambas pantallas información para resaltar la deportividad de este RS3. Respecto al diseño del tablero general y del habitáculo, la distribución es como la conocida en la versión S3, encontrando detalles que remarcan la personalidad de este deportivo RS3.

Retomando el tema de la mecánica que adopta, es la misma que viene en el RS Q3: sus 400 CV entregan un torque de 500 Nm, permitiendo acelerar de 0 a 100 km/h en 3.8 segundos. En cuanto a la velocidad tope, de serie viene con una limitación de 250 km/h, pero si se compra el paquete RS Dynamic puede alcanzar los 290 km/h. Además de esta modificación de gestión electrónica, el paquete incluye discos de freno cerámicos. El motor va hermanado con una caja automática de doble embrague con 7 marchas. Los modos de conducción son variados: Comfort, Auto, Dynamic, RS individual, Efficiency, RS Performance y RS Torque Rear. Junto a esta variedad de modos de conducción, cuenta con tecnología acorde para transmitir toda la potencia de este poderoso 2.5 TFSI: para ello reemplaza al conocido diferencial y sistema de embrague multidisco, y estrena la tecnología denominada Audi RS Torque Splitter.

Con esta nueva tecnología, se gestiona el reparto del par motor en el eje trasero mediante un embrague multidisco controlado electrónicamente en cada eje de transmisión; o sea, que se controla en cada rueda trasera. Por otro lado, este nuevo sistema de reparto de torque, está adaptado especialmente para el modo de conducción RS Performance que está pensado para ser aplicado en circuitos donde se puede exprimir todo el jugo que puede aportar este monstruito, minimizando tanto el subviraje como el sobreviraje. El modo RS Torque Rear adapta la transmisión para poder realizar los derrapes conocidos como “drifting”, canalizando una mayor potencia a una de las ruedas. La adaptación de la suspensión es específica para este RS3, variando los ángulos de cámber negativo en el tren delantero para mejorar el desempeño dinámico en las curvas, mientras que en el anclaje del tren trasero varía apenas 0.5 grados, que también influye.

Como nos podemos imaginar, Audi nos va a ofrecer un producto muy deportivo y exclusivo, con todos los ingredientes necesarios para satisfacer a un exigente conductor que quiera extraer todo el potencial capaz de brindar en una pista o circuito, pudiendo comportarse como un auto que circula sobre rieles, o hasta para aquellos exquisitos cuyo placer es saborear el drifting y gastar caucho a sabiendas que tienen las riendas del poderoso RS3.