Presentación del nuevo Hyundai Elantra 2021.

Con el solo hecho de observar las líneas llamativas que los diseñadores utilizaron para plasmar el nuevo lenguaje expresivo de volumen, contorno y expresión, Hyundai se atrevió a presentar un nuevo estilo totalmente futurista y arrojado, siendo más arriesgado en la utilización de líneas bién rectas y agudas, jugando tridimensionalmente con el cruce de líneas de tensión que generan una visión muy fuerte. Este estilo está conjugado con un elevado nivel de sofisticación y mejora en la calidad de materiales empleados en el interior del habitáculo, que por cierto la demanda actual exige imperativamente. Si quisiéramos hacer un pequeño comentario de lo que representa este nuevo estilo, sin dudas caemos en mencionar que estamos en presencia de un modelo absoluta y totalmente nuevo y moderno, que da vuelta la página con respecto a la actual generación. Las líneas son tan audaces, que hasta incluso adopta el estilo fastback, generando a primera vista la impresión de estar frente a un vehículo de mayor porte, más bajo y ancho, con aires de deportividad bién acentuado. En un recorrido visual perimetral, detectamos una trompa totalmente nueva, con su estrella central que es la inmensa parrilla con una forma y trabajo particular, cuyo reticulado simula la forma de diamantes. En los extremos de la misma, se integran unas nuevas y alargadas ópticas con tecnología led que se prolongan en la parte superior de los guardabarros, pero que a su vez continúa la línea ascendente del mismo generando una imagen de fluidez. En la parte baja del parachoques, incorpora un alerón plano fijo que le confiere un aporte aerodinámico y deportivo, continuando en los extremos y elevándose hacia la óptica, formando una superficie triangular con otra línea de tensión, que simula una entrada de aire.

En su perfil se puede apreciar el contorno de su línea superior que establece que estamos en presencia de un fastback; esta denominación responde al hecho que una vez que la línea del techo llega al tercer parante, adopta una pendiente continua menor en todo su descenso para terminar en la parte posterior de la tapa del baúl. Desde su frente hasta su zaga, es atravesado por una línea de tensión ascendente que establece una forma de penetración en cuña, y a su vez junto a otra línea casi paralela a la altura de los bajos de las puertas de acceso, es atravesada por otra línea formando una gran letra en forma de “Z” que acentúa su volumen jugando muy bien con el efecto tridimensional. En este juego aporta lo suyo el hecho que los hombros de los guardabarros traseros están bastante resaltados, “provocando” un efecto musculoso.  Asimismo, este resalto contribuye al efecto totalmente particular que le dan al acabado muy elaborado de su parte trasera, donde los laterales posteriores al tercer parante se van angostando hacia atrás hasta llegar al quiebre de volumen, quedando al descubierto ese ensanchamiento de hombros del guardabarros trasero que se prolongan y aumentan de superficie a medida que se acerca a la altura de las ópticas traseras.

Este juego de volúmenes, se acota al llegar a la línea superior de la tapa de baúl, donde comienza otro juego de líneas rectas y trazos que se combinan y forman áreas cóncavas que alojan unas hermosas ópticas de forma triangular. Ambas están conectadas con un acrílico rojo delgado que adopta estilos similares al de otras marcas. En esta zona nuevamente juega tridimensionalmente con líneas y volúmenes, otorgando un carácter bien aguerrido. Sin dudas, los diseñadores lograron un producto con un carácter muy personal y arrojado, pero a su vez llama muy bién la atención con ese juego de volúmenes. Realmente lograron un diseño muy novedoso.

Pero no todo termina con lo visual. Porque una vez dentro del habitáculo, vamos a descubrir que el entorno que rodea a sus ocupantes, cambió radicalmente. El piloto tiene todo lo necesario para conducir en un entorno como si fuera la cabina de un avión: estilo envolvente y todo está orientado hacia él. Los cambios visuales son muy interesantes, dotando de volante de conducir nuevo, pantalla de instrumentos digital configurable, y pantalla central de tipo táctil de 10,25 pulgadas ambas. Incorpora mucha tecnología volcada en las ayudas a la conducción, pero también hace hincapié en el tema de infoentretenimiento, incorporando compatibilidad del sistema con Android Auto y Apple CarPlay, implementando un nuevo sistema de reconocimiento por voz con capacidad de entender, aprender e interactuar con el conductor del vehículo para controlar casi todas las funciones del auto.

Con respecto a las plantas motrices, inicialmente se ofrecerán 2 alternativas, de las cuales una es con un motor alternativo de 2.0 litros aspirado con 149 CV y con el empleo de una caja automática CVT con gestión electrónica desarrollada por Hyundai que denominan IVT (Intelligent Variable Transmission). Y la otra alternativa ofrece una opción híbrida, integrada por un motor 1.6 litros GDI de 4 cilindros de ciclo Atkinson que junto a un motor eléctrico de imán permanente de 32 Kw de potencia (42 CV) alimentado por una batería de iones de litio de 1.32 Kwh de capacidad ubicada debajo de los asientos de la segunda fila, entregan en conjunto una potencia máxima de 139 CV y un par de 264 Nm. Esta segunda opción, está hermanada a una caja automática de doble embrague de 6 marchas.

Si bien estaba previsto que se empiece a comercializar para fines del presente año, es probable que los plazos se vean alterados por la actual situación imperante a nivel global. Es de esperar que ni bien se normalice la situación, podamos contar con este nuevo vehículo y de esta manera poder disfrutarlo y sacarnos las dudas del comportamiento general, ya que el primer paso ha sido dado por la empresa: generar una muy buena primera impresión.